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Antoni Barbarà, en un puente sobre el Sena en París.

Servicios públicos: luchando por una Europa social

Resolución / Moción aprobada en el 3er Congreso del Partido de la Izquierda Europea (PIE), en París a 5 de diciembre de 2010

ANTONI BARBARÀ
PARÍS


No hay duda de que la lucha por una Europa social, una Europa de servicios públicos, de los derechos sociales, la equidad, la igualdad entre géneros y todo lo que abarca el Estado de bienestar ha sido, es y seguirá siendo una parte clave de nuestra identidad.

Se suponía que un cierto desarrollo en políticas de servicios públicos ya era una realidad, prácticamente irreversible, aun conocidas las grandes diferencias entre los Estados. Pero la crisis dura y estructural ha puesto de relieve el grado de precariedad y fragilidad de los actuales estados de bienestar debido a las políticas de las élites neoliberales. El desarrollo social que se obtuvo tras muchos siglos de luchas populares y de la clase obrera está ahora en declive. Estamos viendo un violento ataque que pretende parasitar, privatizar, revertir y, en definitiva, eliminar los sistemas públicos y sociales, así como los servicios básicos –llamados en la jerga de la Unión Europea: "servicios de interés general".

Esto es especialmente importante y peligroso para tres de los pilares de los servicios públicos: la gestión de los bienes comunes, tales como salud, educación y servicios sociales. Y eso significa que peligran los sistemas de salud pública, educación y servicios sociales. También tenemos en cuenta otros servicios públicos como la gestión de bienes comunes como el agua, la energía, el transporte, las comunicaciones, los servicios postales, etc. Todos ellos merecen consideración específica al mismo tiempo que comparten muchos elementos en común (economía, financiación, condiciones de trabajo, etc.) o bien con elementos específicos tales como la sostenibilidad, la tecnología, el modelo de crecimiento, la historia de cada nación.
Àngels Martínez interviene en el congreso del PIE.

Por lo tanto, sin apartarnos de nuestras propuestas y en consonancia con los objetivos ya expresados en la Plataforma Electoral del PIE, planteamos:

-- Fin de las privatizaciones y por unos servicios públicos.
– La educación, cuidado de la infancia, atención de la adolescencia, la enfermedad y la vejez, la salud, abastecimiento de agua, alcantarillado, suministro de energía, transporte público, servicios postales, cultura y deporte no son bienes comerciales sino servicios públicos y por lo tanto, una responsabilidad del Estado.
-- No deben ser sometidos a competencia para obtener el menor costo y el mayor beneficio. No queremos más privatización de servicios públicos como mercancías, sino su transformación en propiedad pública. Estamos comprometidos por fuertes servicios públicos, empresas controladas públicamente y por más inversión en educación, enfermería y atención de la salud, transporte público, deporte y cultura.
-- El PIE formará un Grupo de Trabajo para debatir el tema de servicios comunitarios, sociales y los principales servicios públicos desde nuestra perspectiva y hacer una evaluación y propuestas en el ámbito de la salud y la atención de la sanidad, educación, universidad y servicios sociales. Nuestros análisis y propuestas comprenderán dos partes:

Salud pública, educación y servicios sociales

1) un análisis de la situación actual de los sistemas nacionales de salud pública, educación y servicios sociales; de los ataques que se lanzan desde sectores corporativos con la complicidad o la tolerancia de los gobiernos y las instituciones. De hecho, es la Unión Europea, directamente o a través de sus organismos, quien encabeza ese proceso. El tsunami de la privatización involucra a los mismos protagonistas en todos los países y en todos los ámbitos.

2) Para estudiar las cuestiones específicas de cada sector, en cada Estado y en cada situación específica. Así, por ejemplo, las condiciones de trabajo de las distintas profesiones y empleos, la calidad de los servicios, si son universales, su accesibilidad, su extensión y, si son públicos, justos y basados en la solidaridad. Por último, las leyes y los reglamentos europeos que afectan al modelo europeo y su futuro, tales como el "plan Bolonia", la cuestión de la salud de tipo transfronterizo, o el registro de reglamentación farmacéutico.


Con este método confederamos el trabajo de nuestros respectivos grupos y, entretanto, unificamos nuestro llamamiento para unos servicios públicos de la máxima calidad y equidad, entendidos como esencia de derechos --no como simples productos de mercado-- en una Europa que debe ser necesariamente Social.
Antoni Barbarà, en su intervención en el congreso del PIE.

Veremos cómo encajar esta línea de trabajo con la propuesta congresual de Francis Wurtz cara a una iniciativa ciudadana a extender y difundir por toda la UE y de la que hablaba Àngels Martínez Castells.

Salud !!

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